Quique Antún afirma: Morales Troncoso tiene condiciones para encabezar un proyecto de poder

El presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Federico Antún Batlle, afirmó que esa organización tiene muy buenas perspectivas para las elecciones presidenciales de 2012 porque cuenta con figuras prominentes, como el Canciller Carlos Morales Troncoso, para encabezar un proyecto de poder serio, responsable y de futuro.

Explicó que la reunificación del PRSC ha sido muy fructífera, porque ha generado un gran entusiasmo y esperanza a la militancia y simpatizantes de la formación para volver al poder.“Morales Troncoso tiene las condiciones para liderar un proyecto de poder, porque es una de las figuras más prominentes que tiene el Partido Reformista”, destacó.En ese sentido, Quique Antún dijo que el partido colorao tiene muy buenas perspectivas de futuro “porque el reencuentro de la familia balaguerista ha devuelto a la organización unidad y fortaleza, lo que le brinda la oportunidad de competir con éxito en las elecciones de medio término y en las presidenciales de 2012”.


Entiende que la unidad del reformismo debe seguir fortaleciéndose con el proceso de reestructuración que deberá darse en los próximos meses “y concomitantemente trazar el marco estratégico hacia las elecciones congresuales y municipales”Insistió que la unidad del partido “marcha como debe ser”, con la integración al trabajo partidario de la inmensa mayoría de dirigentes y cuadros en todo el país.
Antún Batlle manifestó que los reformistas no tenían otro camino que la reunificación, “porque la dispersión y la división no llega a ningún camino”.“Dice la palabra de Dios que un reino dividido no prevalecerá y esta reunificación con amor, confraternidad y desprendimiento es lo único que puede dar fruto para que el reformismo vuelva a ser la fuerza que en otrora fue y que necesita la sociedad”, destacó.




El dirigente reformita dice que los “dos o tres” dirigentes que han expresado algunos criterios divergentes lo hacen para llamar la atención.“Lo que habría que ver” –agregó- “es la fuerza que podrían tener esos dirigentes a lo interno de la organización y en la propia sociedad”.

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